Enseñan a generar huertos urbanos
Se impartió el taller “Huertos urbanos y responsabilidad social”, promovido por la Coordinación de Proyectos de Gestión Ambiental con el apoyo de la Coordinación General de Recursos Humanos, el cual fue dirigido a los responsables ambientales de las unidades académicas de los tres campus de la UABC.
Este taller tiene como objetivo brindar a dicho personal las habilidades teóricas y prácticas para crear espacios sustentables basados en la conciencia ambiental y la adopción de hábitos que fomenten el cuidado y sustentabilidad ambiental. Fue impartido por la académica del Instituto de Ciencias Agrícolas, la doctora Blancka Yesenia Samaniego Gámez, quien presentó cómo establecer un huerto urbano, el uso de recipientes y macetas, además información relevante para el manejo de plagas y enfermedades.
La agricultura urbana es la práctica de cultivar en espacios dentro de pueblos o ciudades; crea empleos, recicla residuos urbanos, genera cinturones verdes y fortalece la resiliencia de las ciudades frente al cambio climático. El método biointensivo es un tipo de agricultura viable para la producción orgánica e intensa de alimentos que no emplea maquinaria ni químicos.
Sobre los huertos urbanos mencionó que existen de dos tipos: el huerto familiar biointensivo, que es un cultivo en pequeñas superficies y de forma manual e intensa, con técnicas sustentables y favorables con el medio ambiente, mientras que los huertos urbanos son especies vegetales cultivadas en área urbana y en recipientes o suelos de forma manual e intensiva.
Se presentaron las técnicas y condiciones para establecer un huerto urbano biointensivo, entre ellas, lo que significa un suelo vivo, la preparación para cama de cultivo, la importancia de la doble excavación para preparar el terreno, el uso de composta y otros abonos, así como la forma de lograr un trasplante efectivo.
Además, se abordó el uso de recipientes o macetas para crear un huerto urbano, los cuales deben tener suficiente espacio para el cultivo, colocarse en lugares donde se reciba la cantidad necesaria de luz solar y viento, que cuente con una buena temperatura y accesible para ofrecerle los cuidados que requieran los cultivos.