La accesibilidad y solidaridad son clave para la formación profesional
María Fernanda se esfuerza por lograr sus sueños, ser escritora y docente
María Fernanda Ceceñas Toribio, estudiante de la carrera de Lengua y Literatura de Hispanoamérica, en la Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales, Campus Tijuana, compartió su perspectiva como universitaria y persona con discapacidad motriz, contándonos experiencias cotidianas.
La estudiante mencionó que desde muy pequeña encontró su pasión en la escritura y la lectura, de las reflexiones que estas conllevan ampliando su conocimiento, más allá de la trama como tal, y lo que provoca; por lo que su interés está dividido en dos partes, las posibilidades creativas que puede desarrollar y el lado académico que le brinda un conocimiento inspirador y reflexivo.
Para ella, su estancia en la UABC ha sido amena, recibe el apoyo de sus compañeras, compañeros y docentes, quienes le brindan la ayuda necesaria para desarrollarse académicamente, la orientan a la hora de realizar algún trámite o comparten con ella su amistad. “Hay comprensión, apoyo y tolerancia, por decirlo de alguna forma, a las situaciones que las personas con discapacidad tenemos; y creo que, si en una palabra lo pudiera definir, es solidaridad”.
Su situación académica es similar, aunque se le pueda dificultar la entrega de trabajos a tiempo, reitera lo accesibles que son las y los docentes en estos aspectos. “Siempre hay espacios de escucha, retroalimentación y de apoyo, entonces, creo que es una parte muy bonita a comparación de etapas académicas anteriores, sí me topé con un entorno muy amigable y por lo mismo, ha sido lo que más me gusta de mi estadía aquí”, comentó.
Entre sus metas están graduarse, titularse y llegar a ser escritora, también le interesa continuar con la tutoría o docencia de español como segunda lengua, lo cual lleva a cabo a través de su servicio social profesional, actividad de la que llegó a enamorarse, por lo que le gustaría ser docente de lleno.
Compartió los aspectos que considera, podrían hacer que la UABC sea más incluyente, como concientizar más acerca de las personas con discapacidad; que los y las docentes se den un tiempo para acercarse al alumno o alumna y preguntarle: “¿Cómo te puedo ayudar? ¿Qué necesitas?”, para evitar que estudiantes se sientan frustrados por no poder cumplir actividades escolares de acuerdo a un estándar o que no sientan apoyo.
Además de tomar en cuenta que cada persona con discapacidad es distinta, con diferentes campos en los que sienten dificultad para participar. “El mensaje o el consejo que puedo compartirles es que sigan luchando por lo que es importante a cada uno, por ese interés que los hace estar aquí estudiando o laborando, en el caso de los docentes. Yo creo que cada uno tiene un objetivo, una razón por la cual está donde está, y creo que esa emoción nunca se debe perder, siempre va a haber situaciones complicadas que te desanimen, pero se necesita volver a esa razón por la que en un principio uno quiso iniciar la carrera o comenzar de docente. Así que creo que nunca hay que perder esa chispa”, compartió María Fernanda.