Cimarrona realizó prácticas profesionales en la Corte Interamericana de Derechos Humanos
Paulina Lizbeth Ruvalcaba, de octavo semestre de la Facultad de Derecho Tijuana, realizó sus prácticas profesionales en la Corte Interamericana de Derechos Humanos, en Costa Rica, durante el semestre 2024-1.
Compartió distintas perspectivas sobre su experiencia durante el periodo de practicante, entre ellas, cómo es que tuvo la oportunidad de hacer sus prácticas profesionales fuera de México. Señaló que al estar cursando un diplomado sobre Derecho Internacional y Derechos Humanos, el tema sobre el sistema Interamericano captó su completa atención y generó vocación hacia esa área, e inició a participar en competencias y concursos, como el Interamericano en Washington y otro más en Puebla, ganando ambos.
Paulina narró que cuando se adentró más al área de los Derechos Humanos se percató de los sistemas regionales para su protección y que el tribunal más importante en nuestro continente se encuentra en San José, Costa Rica. La Corte Interamericana es el máximo tribunal internacional de América en materia de Derechos Humanos, y actualmente cuenta con representación mexicana a través del doctor Eduardo Ferrer Mac-Gregor Poiston, quien es egresado de nuestra universidad y doctor honoris causa; por otro lado, Paulina recibió apoyo total de su facultad, apoyos económicos y académicos, para postularse y ser aceptada.
Durante sus prácticas estuvo presente en audiencias públicas, debates y mesas de trabajo, además de estar involucrada en la supervisión de sentencias; dichas experiencias, confiesa, fueron amenas y la dejaron “sin palabras” por la grata travesía. “Me encerraba completamente nada más en lo que pasa en México, en el contexto que ocurre aquí…”, expresó. Explicó que con el cambio de territorio también cambiaron las dinámicas de trabajo que eran conocidas para ella, y agregó que amplió su panorama sobre cómo se hacen las cosas en otros países y qué se puede aprender de ellos.
Para finalizar, explicó que además de las habilidades que desarrolló mediante su estadía en la corte, reflexionó sobre lo que la acentúa en su decisión de ser abogada, poder algún día contribuir y dejar huella en México, para tener una protección más amplia de los derechos humanos, en distintos contextos y ámbitos, a quienes pueden sufrir diferentes tipos discriminación y sean susceptibles a experimentar vulnerabilidades y violaciones en sus derechos humanos.
“Independientemente de la carrera o la ocasión que uno tenga, no rendirse, siempre se abren las puertas. Cuando una persona puede llegar a ser disciplinado, a veces cuesta muchísimo trabajo, a veces es muy fácil tirar la toalla, pero mientras uno se siga levantando yo creo que la vida te puede llevar hasta donde tú quieras, y no dejarse achicar por ciertas circunstancias, por sentir que somos estudiantes que no tenemos cierta experiencia o que nos faltan ciertos requisitos, nunca es tarde para seguirse preparando”, aconsejó Paulina a la comunidad cimarrona.