En el marco de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, la Vicerrectoría del Campus Tijuana llevó a cabo la charla “Cimarronas exitosas de la Vicerrectoría del Campus Tijuana” con el objetivo de conocer el talento y trabajo que dan las mujeres en el campus.

En el conversatorio participaron Zulema Margarita Ramírez Anguiano, licenciada en Derecho y encargada del Área de Propiedad Intelectual y Derechos de Autor en el Departamento de Apoyo a la Docencia y la Investigación; Rosa Areli Arámburo Lizárraga, licenciada en Administración Pública y Ciencias Políticas, quien labora en el Departamento de Recursos Humanos en atención a personal docente ;y Yazuri Kristal Durán Gallegos, licenciada en Docencia de la Lengua y Literatura que trabaja en el Departamento de Servicios Estudiantiles y Gestión Escolar. 

La vicerrectora del Campus Tijuana, maestra Edith Montiel Ayala, abrió la charla y aseguró que era de suma importancia crear espacios donde las mujeres pudieran compartir la labor que realizan en la universidad. 

“Se han logrado grandes cambios en cuanto al papel de la mujer en el contexto profesional, sin embargo, estamos conscientes de que aun faltan muchos que seguramente mejorarán aún más las condiciones de desarrollo de las mujeres en las instituciones de educación superior”.

Asimismo, compartió que ella misma ha tenido que enfrentar grandes retos para poder alcanzar sus objetivos y metas profesionales, pero recordó que es de gran importancia creer en las aptitudes personales y recurrir siempre a los actos de sororidad que permiten alcanzar los objetivos de las mujeres de forma colectiva sin olvidar a ninguna. 

La charla consistió en responder algunas preguntas sobre lo que motivó a las invitadas a seguirse superando de forma académica y posteriormente profesional. Las licenciadas compartieron sus anécdotas, entre comentarios que mencionaron sus historias de migración, de superación personal y sobre los diversos obstáculos que tuvieron que enfrentar. 

Las historias dejaron en claro que el tiempo no es una excusa, así como el crecer personal en el ámbito familiar no es un alto para dejar de crecer en el área profesional. Entre familia y trabajo, es posible mantener el balance que se requiere. 

La licenciada Yazuri aseguró que ella encontró una gran inspiración el estar trabajando en el área de gestión escolar, donde convivió con alumnos y padres de familia, a quienes observó realizar sus metas educativas, y que aun cuando para ese momento ella se encontraba ya formando una familia, eso fue solo otra motivación para persistir y seguir avanzando en sus estudios. 

Mencionaron también el orgullo y honor que sienten al pertenecer al equipo de la UABC, pues encontraron que la universidad es una base fundamental que ha funcionado para solo seguir progresando y realizando su desarrollo por medio del continuo aprendizaje que se tiene al permanecer a la vanguardia, ya que la institución siempre se mantiene al tanto de todo lo que puede brindar a la comunidad, por lo que aseguraron que ese compromiso de parte de la institución es algo invaluable, por lo que se encuentran sumamente agradecidas. 

El desarrollo profesional ha servido de múltiples formas para seguir desarrollando su trabajo en las áreas en las que se encuentran, admitieron que no ha sido fácil pues tuvieron que trabajar y estudiar al mismo tiempo, encontrándose muchas veces con horarios demandantes que incluso llegaron a encontrarse sin tiempo para sí mismas. 

También encontraron útiles consejos para quienes quieran seguir sus pasos, estando de acuerdo las tres invitadas en que el compromiso con la universidad, así como el carisma, la amabilidad y educación es todo lo que necesitan para superar las pruebas, además del gran respeto y honestidad a su persona, pues es un trabajo diario el seguir con el esfuerzo. 

El conversatorio finalizó con un gran respeto y admiración hacia las mujeres que, en estos momentos, al igual que ellas cumplen no solo con su desempeño laboral, sino que también con su rutina familiar, escolar y social, sobre todo en la actual contingencia que ha impuesto más peso sobre los hombros de la mujer.